UN NEGOCIO FAMILIAR
La calidad de ciertos productos fueron ganando terreno y prestigio, convirtiéndonos en la actualidad en un referente del sector en la elaboración del roscón.
Fué en el año 1930 cuando Doña Josefa Copena Araujo y su marido, Don Alfonso Valverde, inauguran la Panadería Copena Camos. Con tres hijos pequeños y en plena guerra civil, Doña Josefa se queda viuda y pasa a llevar ella sola la Panadería. Con gran esfuerzo saca adelante el negocio, en una época en la que la escasez de recursos económicos era muy patente en toda la comarca. Sus hijos (dos chicas y un niño) se van acercando a la adolescencia y colaboran con su madre en todo lo que pueden.
Finalmente son los dos hijos menores los que se quedan definitivamente a trabajar en la panadería, pasando ésta a la segunda generación, compuesta por D. Alfonso Valverde Copena y Doña Esperanza Valverde Copena.
La Panadería se estaba transformando, e iban adquiriendo mayor prestigio los productos de confitería: panes de nuez, brazos de gitano, keikes, magdalenas y tartas de almendra, eran despachados con bastante éxito, sobre todo durante los fines de semana.
Sin embargo, por encima de todos los demás, el Roscón se consolidaba como el producto estrella, pasando a centrar toda la atención en el proceso de su elaboración rigurosamente artesanal, con el fin de mantener viva las características esenciales del producto que lo hacían diferente a los demás: su sabor mantecoso, la esponjosidad del tacto, lo bien que se acompaña con una taza de leche o café, son cualidades que se mantienen hasta nuestros días.
El Roscón de Camos traspasó las fronteras del Valle Miñor, llegando su olor y sabor a la ciudad de Vigo, donde sus habitantes visitan con mucha frecuencia esta comarca, bien como zona de paseo o bien como zona donde ubicar su segunda residencia (primera ya en muchas ocasiones, debido al crecimiento de la ciudad hacia las afueras).
En la actualidad, la tercera generación mantiene viva la tradición. Hemos abierto un segundo negocio en la comarca, con una apariencia más moderna, con una mayor gama de productos (recomendamos nuestra pastelería en general, nuestro croissant, nuestras tartas variadas y modernas), pero seguimos apostando muy fuerte por la elaboración artesanal en toda su extensión.
A la cabeza de esta producción seguimos situando al Roscón de Camos, como hicieron nuestra abuela y nuestros padres, elaborándolo con los mismos ingredientes y con la misma pausa que hace casi 80 años.
El cliente es el que tiene la última palabra y hasta ahora nos sentimos tremendamente satisfechos de su respuesta. Por ello intentamos adaptarnos al tiempo actual y dar un paso más en nuestro afán de satisfacer al mayor número posible: hemos creado nuestra página web y apostamos por un nombre que define claramente nuestro producto por excelencia: roscondecamos.com. Visítanos para conocernos mejor a nosotros y nuestros productos.
El Roscón es un dulce elaborado con harina, huevos, azúcar y manteca. Aunque se consume todo el año, es típico de la Semana Santa, donde, siguiendo la tradición, los padrinos regalan uno a sus ahijados el Domingo de Pascua. También es típico en la Festividad de Reyes, época en la que incluye una sorpresa en su interior.
Elaboración artesanal
Nuestros productos se elaboran de forma artesanal, como siempre se ha hecho, cuidando la tradición para que no se pierda lo bueno.
El nuevo local de Baiona
Imágenes de nuestro nuevo local en Baiona. Además de Panadería y Confitería es también cafetería. Entra a conocerlo.
Roscón de Camos en Pascua
Desde el Jueves Santo hasta el Domingo de Pascua, de nuestros hornos no deja de salir roscón. Es la época de mayor trabajo de todo el año.
